¿Qué parte de nuestro cuerpo segrega un poema?

Las secreciones
Los poemas
que dan 
continuidad 
a nuestros cuerpos.

No dejan de ser nuestras las lágrimas,
          continuación de nuestros ojos,
aunque rompan sobre una mesa
o se extingan sobre otro hombro.
Así mismo un poema. 

No deja de ser nuestro el aliento,
          continuación de nuestro pecho,
aunque no tenga forma ni peso
y se nos vaya efímero entre los dedos.
Así mismo un poema.

No deja de ser nuestro el semen
         continuación de nuestro sexo,
pacto de carne y sueño
aunque reciba o se vierta en otros
Así mismo un poema.

No deja de ser nuestra la saliva,
        continuación de nuestra boca,
aunque tibia selle otros cuerpos
aunque se estrelle en su cielo.
Así mismo un poema.

Los poemas
Las secreciones
que dan
continuidad 
a nuestros cuerpos

Pero
¿Qué parte de nuestro cuerpo segrega un poema?


Artemio Rulán. La enfermedad de Artemio Rulán.